Kateryna Baindl obtuvo dos victorias en cuartos de final y semifinales el sábado para llegar a la segunda final de singles de la WTA de su carrera en el Gran Premio de Hungría.
Para comenzar el día, la No. 100 del mundo, Baindl, terminó un cuarto de final retrasado por el clima contra la última húngara Fanny Stollar; el partido se pospuso después de solo dos juegos el viernes, y Baindl regresó por la mañana para completar una victoria por 7-6 y 6-3 sobre Stollar.
Baindl regresó más tarde en el día para ganar dos sets viniendo desde atrás en su semifinal contra Claire Liu, número 88 del ranking, con parciales de 7-5, y 7-6; Baindl salvó tres puntos de set en 5-4 en el primer set, luego luchó para recuperarse de 4-1 en el segundo set para cerrar su largo día.
“Estoy muy feliz de ganar dos partidos hoy, no fue fácil”, dijo Baindl en la cancha después de su victoria en la semifinal. “Estoy feliz de haber podido manejar eso. Muestra que estoy en buena forma físicamente. Esta es una buena noticia”.
“Después del primer partido intenté desconectar y recuperarme lo antes posible, y estar concentrado para el siguiente, y me alegro de haberlo podido hacer hoy”.
La final anterior de Baindl fue en Taipei en 2018, donde terminó como subcampeona detrás de Timea Babos.
Maria Timofeeva se unió a Baindl en la final con un agotador triunfo en semifinales por 7-6, 3-6, 6-3 sobre Nadia Podoroska. Timofeeva, de 19 años, necesitó 3 horas y 11 minutos para superar a la ex semifinalista de Roland Garros, Podoroska, y llegar a su primera final de la WTA. 
