El suizo Granit Xhaka, mediocampista del Arsenal, aseguró este miércoles que su altercado con los aficionados de la escuadra londinense “quedó en el pasado” y ha experimentado un “nuevo comienzo” desde que el español Mikel Arteta relevó a Unai Emery en el banquillo.
“Esos silbidos en mi contra y ese odio era nuevo para mí. Lo que pasó, pasó. No lo puedo deshacer. Tal vez fue un malentendido y ambas partes reaccionaron exageradamente. Para mí ya es un tema resuelto”, explicó a una televisora alemana.
Fue el pasado mes de octubre cuando, durante un encuentro ante el Crystal Palace, Emery relevó a Xhaka, quien fue abucheado y silbado por la afición mientras abandonaba la cancha, reclamos que el helvético respondió con insultos y señas obscenas, lo cual estuvo cerca de costarle su lugar en el club “Gunner”.
“Tienes que mirar hacia adelante, motivarte en la situación actual y no quedarte con lo negativo. Como dije por aquel entonces, como equipo y aficionados debemos trabajar de la mano todos juntos para el próximo desafío, con respeto y en memoria de lo que nos hace amar este deporte”, añadió.
Sólo días después de ese lamentable episodio, el internacional suizo denunció amenazas de muerte en contra de su persona y su familia, situación por la cual estuvo cerca de fichar por el Hertha de Berlín, “hubo contactos y una oferta, pero decidí quedarme en Londres y no echar por tierra todo lo que construí en tres años y medio”.
Notimex/Foto: @Arsenal